jueves, 8 de enero de 2009

Cataratas de Iguazú











Sólo tengo una palabra: Alucinante! Desde luego es lo más espectacular que he visto durante el viaje. Tres días estuve en la zona, uno para el lado brasileiro y otro para el argentino, pero como ya cambió el idioma (qué ganas tenía!, aunque ya podía mantener conversación en portugués) y el hostel estaba genial me quedé uno más. Que gusto ahora en tierra argentina poderse expresar con todas las palabras! Desde el lado brasileiro se ve desde lejos, sin embargo desde el argentino estas justo arriba de la Garganta del Diablo, es increíble. Además la excursión con la lancha por debajo de las cataratas me auodó a sofocar el calor insoportable pasé ese día de estrés ya que de ahí me iba para Córdoba.

Al interior de brasil: El Pantanal
















El grupo se disolvió y sólo los franceses y yo nos dirigimos al Pantanal, a unas 22 horas hacia el interior, casi en la frontera con Bolivia. Tres días de naturaleza en su puro estado. Caimanes, pesca de pirañas, senderismo, tucanes, loros, guacamayos, galopadas a caballo, amaneceres de ensueño,... Vamos, que era como estar dentro de un documental del National Geographic!

De Ilha Grande a Parati
















Después del fin de semana en Ilha Grande los miembros del grupo recién formado se trasladan a Parati, un pueblecito colonial (adoquinado hasta el punto de ser dificil transitar sus calles) portugués desde el que se exportaba el oro de Brasil a Portugal. También bonitas playas en sus alrededores y el clima un poco extraño, veis la bruma? Un par de días creo que estuvimos por aquí.

Ah! Podéis ver a mis alumnos en mi primera clase de capoeira!!

martes, 6 de enero de 2009

Algunas fotos más de Ilha Grande







Como se puede comprobar en la foto mi cara era pura felicidad. Otra es de algunos miembros del grupo cuando nos juntamos por la noche a tomar cervecitas. La otra es del día de la excursión comiendo pescadito fresco en una playa espectacular.

Escapada en solitario a Ilha Grande
















Por fín vuelvo al Blog!! Ya era hora dirán algunos! Pues tienen razón! Nos habíamos quedado en Rio de Janeiro. Allí fue donde tras una semana viviendo en casa de la familia de Pilvio mis sensores cerebrales me indicaron que ya era hora de empezar la aventura. Así fue como, por recomendaciones, me dirigí hacia Ilha Grande, a unas 2 horas de Rio. La llegada fue espectacular, ya véis en las fotos. Y la verdad es que la soledad me duró poco. Al llegar a una playa llamada Lopez Mendez me encontré con una chica española que estaba con su pareja degustando unas deliciosas lonchas de jamón ibérico. Increíble, no? A la noche ya cené con ellos y nos juntamos un buen grupo: la pareja, dos franceses y Pablo, un chico ecuatoriano que hablaba mucho idiomas y muy buena gente. Senderos por la selva, playas espectaculares, excursiones en barco, snorkel y cervecitas en la noche,... Bueno, la verdad es que empezaba bien la cosa!