




El grupo se disolvió y sólo los franceses y yo nos dirigimos al Pantanal, a unas 22 horas hacia el interior, casi en la frontera con Bolivia. Tres días de naturaleza en su puro estado. Caimanes, pesca de pirañas, senderismo, tucanes, loros, guacamayos, galopadas a caballo, amaneceres de ensueño,... Vamos, que era como estar dentro de un documental del National Geographic!
No hay comentarios:
Publicar un comentario